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Se nos acaba el cuatrimestre y nos quedan los últimos trabajos que entregar. Os traigo el último de dibujo a carboncillo, un deportista griego con lanza al hombro que camina hacia la victoria: el Doríforo de Policleto.
El original era de bronce y representa muy bien el Kanon que empleaba Policreto en sus esculturas: las siete cabezas. El filósofo Pitágoras concedía gran importancia al número siete, era 3+4, la unión del hombre (4) con la divinidad (3). Es una escultura llena de armonía, simetría y orden, al mas puro gusto clásico. Policleto innovó en sus esculturas dotándolas de lo que se denomina contraposto, es decir una leve inclinación de la cadera para que el peso de la figura se apoye en una pierna.
